[ Estación Mapocho ]

Durante el Gobierno del Presidente Pedro Montt y con vistas al Centenario de La Independencia de Chile, fue construida la nueva Estación de Ferrocarriles que le permitió a Santiago estar conectada con la ciudad de Mendoza, el Puerto de Valparaíso y las ciudades del Norte de Chile. La construcción de esta Estación se realizó entre los años 1904 y 1910 y fue inaugurada en 1913. El edificio es obra del arquitecto chileno Emilio Jécquier, quien después de haber estudiado en Francia en pleno Beaux Arts, volvió al país influenciado por la academia y enseñanzas del connotado arquitecto francés Gustavo Eiffel. Su construcción estuvo a cargo de la Dirección de Arquitectura de Obras Públicas. Su filiación estilística se identifica con un neoclásico francés, tamizado por el sello personal de su arquitecto y con el academicismo de fines del siglo que incorpora las estructuras metálicas y los recursos técnicos del positivismo. En 1987, la Estación Mapocho dejó de funcionar como terminal de trenes. Desde esa fecha, el recinto quedó en desuso y total abandono, pese a existir varios proyectos para habilitar el lugar. La Empresa de Ferrocarriles del Estado traspasó el edificio a CORFO para que ésta vendiera el inmueble y lo privatizara. En estas condiciones lo recibió el Presidente Patricio Aylwin. En mayo de 1991 se decidió llamar a un Concurso Nacional de Arquitectura para convertir el lugar en “un gran centro cultural para así valorar este edificio como Monumento Nacional”. Durante la primera fase, se remodeló sólo la fachada del edificio tanto el interior como exterior. Una de las pocas innovaciones que se realizaron fue el cambio de color de blanco a lúcuma. En esta etapa también se reconstruye la plaza de la Cultura, ubicada en el frontis del edificio y antiguo lugar de estacionamiento, que desde su remodelación se constituyó en un nuevo espacio artístico. En la etapa siguiente se restauró el hall de ingreso, la Gran Nave Central las salas del segundo nivel. Los vidrios y el techo de cobre fueron trabajados en la fase final. Entre las características del edificio destaca el uso de materiales típicamente chilenos: el cobre presente en el techo y el pino oregón de los asientos, los marcos de las ventanas y las salas. Cabe destacar la compleja labor de yesería que realizó en rosetones y molduras y el trabajo de los adoquines en la Plaza de la Cultura. Un Anexo al Centro Cultural Estación Mapocho, es la Casa Amarilla. Esta edificación, que originalmente acogía la casa del jefe de estación y bodegas se prolonga desde la ex estación hacia el Parque de Los Reyes (entre la calle Balmaceda y Plaza Poniente). Actualmente se encuentra funcionando con un espacio teatral.